Desarrollador freelance
Un desarrollador freelance o un analista programador independiente, tiene la labor de crear desde cero programas o aplicaciones que respondan a las necesidades de un cliente o, mejor dicho, a su idea. Puedes verlo esta manera: Supongamos que una persona se acerca a ti y te pregunta si le puedes dibujar un cordero; seguramente ya has escuchado esta pregunta en alguna parte. Asà que decides dibujarle uno, el primer intento deja al cliente insatisfecho y dice que se ve enfermo; en el segundo intento, no le gusta el hecho de que le hayas puesto cuernos; el tercer intento parece que está triste el cordero, y finalmente se te ocurre la idea de dibujar una caja donde supuestamente está el cordero resguardado. Al cliente le encantó tu idea. Pero ¿por qué usamos un ejemplo extraÃdo del libro el principito?
Un analista programador está en la tarea no solamente de crear un programa, sino de analizar profundamente cuál es la necesidad del cliente y plasmarlo a modo de una aplicación o programa. La capacidad de análisis en lo que lo diferencia de los programadores puros. Por otra parte, un analista programador no solamente crea programas desde cero, sino que también es capaz de crear actualizaciones para programas ya existentes, podemos ver como ejemplo que la primera versión del programa fue un cordero enfermo, y la más reciente ha sido una caja. La idea del programa se ha mantenido, sin embargo, ha evolucionado.
El desarrollador freelance se enfoca en realizar un montón de aplicaciones para un montón de clientes. Caso contrario pasa con un desarrollador que trabaja en una oficina para alguna empresa. Este desarrollador que trabaja en oficina puede que desarrolle o bien, parte de la estructura completa de la aplicación principal de la empresa, o aplicaciones exclusivas sobre la compañÃa. Explicado de una mejor manera: Imagina que trabajas para Google, aquà no te encargarán que hagas aplicaciones de unos que otros clientes que usan intermediario el nombre de la empresa para contratar su servicio, sino que Google te asigna ti parte de la labor para la creación de una de sus muchas aplicaciones. Sin embargo, la de la empresa como intermediario es una realidad.
Ahà es donde radica la gran diferencia entre un desarrollador de oficina y un desarrollador freelance. No queremos decir que uno es mejor que otro, o que el trabajo de uno sea más importante que el del otro, simplemente que los clientes y las necesidades que ellos atienden son distintos.